Tacha de «zafio montaje» la acusación contra su mujer, Begoña Gómez, y reafirma su intención de seguir al frente del Gobierno.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha tachado de «zafio montaje» las acusaciones contra su esposa, Begoña Gómez, que atribuye a «asociaciones ultraderechistas», y considera que se trata de un intento de interferir en el resultado de las elecciones europeas que se celebran este domingo, en una nueva carta a la ciudadanía que ha publicado este martes.
Sánchez deja claro que su decisión de continuar al frente del Ejecutivo es «más firme que nunca» pero advierte a los ciudadanos de que en los próximos días verán y escucharán «mucho ruido». «Todo mentira, un gran bulo, uno más», asegura.
Además, responsabiliza a los líderes del PP, Alberto Núñez Feijóo y de Vox, Santiago Abascal, y espera que encuentren «la respuesta que merecen en las urnas, condena y rechazo a sus malas artes», según señala. En todo caso, asegura que no le «quebrarán» y da por hecho que agotará la legislatura al frente del Ejecutivo y por tanto «quedan más de tres años de Gobierno de progreso y avances», asegura.
NUEVA CARTA TRAS LA DECISIÓN DEL JUEZ
El presidente del Gobierno dirige una nueva carta a los ciudadanos horas después de que el juez que investiga la causa contra su mujer decidiese llamarla a declarar como investigada por presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios el próximo 5 de julio.
Hace poco más de un mes, el pasado 24 de abril Sánchez publicó por sorpresa una carta a los españoles en la que amagó con dimitir y se dio cinco días para reflexionar sobre su continuidad al frente del Gobierno. En ese momento reaccionaba a la decisión del mismo juez de iniciar diligencias de investigación contra Begoña Gómez y otorgarle condición de investigada, aunque esta última circunstancia no se conocía en ese momento.
Ahora utiliza el mismo método para expresar su disconformidad con la decisión de llamar a declarar a su mujer como investigada y subraya que esta decisión se produce solo cinco días antes de que se celebren las elecciones al Parlamento Europeo lo cual resulta «extraño», según sostiene.
«Habitualmente, se ha seguido la regla no escrita de no dictar resoluciones susceptibles de condicionar el desarrollo normal de una campaña electoral y, por tanto, el voto de los ciudadanos. En este caso, resulta evidente que esta práctica no se ha respetado. Dejo al lector extraer sus propias conclusiones», indica.
En la misma línea expresada este mismo martes por la portavoz del Gobierno Pilar Alegría en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Sánchez afirma que tanto él como su esposa están «absolutamente tranquilos» porque «no hay nada detrás de esta acusación, sólo un zafio montaje impulsado por las asociaciones ultraderechistas demandantes», afirma.
LA MÁQUINA DEL FANGO ACELERA
A continuación, carga contra Feijóo y Abascal, que a su juicio están utilizando todos los medios a su alcance para quebrarle «en el plano político y personal» con el objetivo de que renuncie y dimita.
«Incluso, como supimos ayer, tratar de forzar mi salida de la Presidencia del Gobierno con una moción de censura mediante una alianza contra natura. Todo les vale», asegura.
Al igual que en su primera carta, Sánchez denuncia la existencia de una máquina del fango contra él y su entorno y dice que es consciente de que esta no iba a parar, sino que iba a acelerarse «conforme aumentara la frustración y la impotencia de la coalición reaccionaria» en la que sitúa a PP, Vox y la organización Manos Limpias, que fue quien presentó la denuncia contra su mujer.
El jefe del Ejecutivo, que después de ese periodo de reflexión de cinco días anunció que seguía al frente del Gobierno «con más fuerza si cabe», según anunció entonces, dice ahora que esta decisión «es más firme que nunca» y considera que la tarea que tiene su Ejecutivo es «más necesaria que nunca».
TODO MENTIRA, UN GRAN BULO
En este sentido, advierte a los ciudadanos de que en los próximos días serán testigos de «una cuidada coreografía diseñada por la coalición ultraderechista para intentar condicionar las elecciones y debilitar al Gobierno».
«Estos días leerá y escuchará usted mucho ruido y aún más furia en tabloides digitales nacidos para propagar bulos, en platós de tertulias televisivas y radiofónicas al servicio de amplificar esa desinformación, y en tribunas donde se rasgarán las vestiduras el Sr. Feijóo y el Sr. Abascal. Todo, mentira. Un gran bulo. Uno más. En lo que respecta a mí, no le quepa duda de que no me quebrarán», asegura.
Además, espera que Feijóo y Abascal, dado que a su juicio intentan interferir en el resultado de las urnas, «encuentren la respuesta que merecen: condena y rechazo a sus malas artes».
Sánchez dice que tanto él como su mujer saben que ella recibe estos «ataques», según los califica, porque es su esposa –«no somos ingenuos», apostilla — al tiempo que vuelve a defender que ella es una mujer trabajadora y honesta «que reivindica su derecho a trabajar sin renunciar a ello por las responsabilidades de su marido».
Finalmente señala que quedan «unos días de ruido antes de las elecciones y unos pocos más antes del verano», pero asegura que también quedan «más de tres años de Gobierno, de progreso y de avances», hasta el final de la legislatura.
[…] Sánchez ve un intento de interferir en el 9J con la citación a su mujer […]
[…] Sánchez ve un intento de interferir en el 9J con la citación a su mujer […]
[…] Sánchez ve un intento de interferir en el 9J con la citación a su mujer […]