Una palmerina emprendedora, de la generación de los 90, esa de las complicaciones, afincada en Almonte y que ha sabido desenvolverse y encontrar su camino. El Condado Noticias ha estado esta semana con Esther Martínez la cual ha mostrado a esta redacción diferentes enseñanzas y lemas de vida.
ECN: ¿Cómo descubres tu vocación?
EM: Es algo muy bonito, ya que desde pequeña he sido una persona a la que le ha gustado ayudar los demás, empoderarlos, animarlos, motivarles. Cuando llega la hora de orientar mis estudios universitarios, la orientadora me hablo del trabajo social y de lo que hace ese trabajo, acompañar a las personas, empoderarlas y eliminar los obstáculos que les están impidiendo ser ellas misma.
En ese momento me enamoré, ese fue el motor por el cual yo quise poner todo mi empeño para estudiar, ya que mi infancia y hasta los 15 años era una alumna media y de las que le quedaban. Pero una vez que descubrí mi vocación, puse el foco y empecé a centrarme y sacar muy buenas notas. Una vez acabé, además con muy buena nota, de hecho, recibí un premio entre los mejores alumnos de mi promoción.
A día de hoy, estoy muy orgullosa de ese cambio y de tomar ese rumbo en mi vida.
ECN: Cuándo comenzaste a estudiar, ¿te planteabas un fututo así?
EM: Cuando comencé a estudiar, el trabajo social desde la perspectiva universitaria, estaba enfocado, en especial al asociacionismo. Pero había una parte que no habíamos estudiado tanto que era el emprendimiento, y una parte de mí que siempre se veía haciendo las cosas de otra manera. Haciendo trabajo social, pero reinventando el trabajo social, entonces no me imaginaba el trabajo, así como estoy ahora.
Tengo un ejemplo a seguir en mi padre, ya que siempre ha sido autónomo y se ha reinventado. Entonces yo me di cuenta que, pese a las circunstancias externas, si tú crees en ti y crees en tus posibilidades creas tu camino, tu destino, no te fijas en lo que te falta, si no en lo que tienes para poder empezar, continuar, reinventarte. Es esa resiliencia maravillosa que todos tenemos dentro, pero que pocas veces hacemos caso.
ECN: Emprender a día de hoy da bastante miedo, ¿cómo decides comenzar este camino?
EM: Yo emprendí tras salir al mundo laboral y ver que era complicado, me pasé varios años en asociaciones, con varios trabajos de horas sueltas a la vez, y bueno me di cuenta que quería estabilidad en mi vida, realizar mi proyecto y empecé a enfocarme. Empecé a emprender, que no es solo montar un negocio, si no tener la actitud de desarrollar una idea, un proyecto, y me decidí a montar mi empresa, mi pasión. Fue todo dándose, pero es cierto que no es un camino de rosas, hay que tener mucha inteligencia emocional, no olvidar cual es la esencia, porque empezaste, que te mueve, para que cuando las cosas no sean tan fáciles te puedas agarrar a eso, a tu fortaleza para seguir tu camino.
ECN: ¿Cómo es el día a día de una emprendedora? De Esther Martínez, en este caso.
EM: Mi día a día es fantástico, nunca un día es igual a otro. Momentos de sesiones, charlas, conferencias, talleres, entonces pues me organizo bien. Tengo varios frentes, peritaje social para la administración de justicia, charlas, conferencias, formación, entre otras. Siempre estoy innovando y creando cosas día a día.
ECN: ¿Es complicado abrirse hueco en este mundo?
EM: Esa pregunta es maravillosa, es cierto que quien no tiene padrino… pero yo me decidí y en mi caso me topé con la creencia popular, de “tú eres muy joven, ¿Dónde vas, no tienes experiencia?”. Odiaba esa frase, porque para poder coger esa experiencia necesitaba la oportunidad de mostraros lo que puedo hacer. Y tras muchos “no”, encontré una nueva forma de venderme, de llegar, de crear. Y ahí estoy, esto es una carrera de fondo, hay que seguir apostando, formándose y apostando por tu crecimiento.
ECN: ¿Qué es lo que más te gusta de lo que haces?
EM: Me gusta todo lo que hago, desde las sesiones presenciales, online, familias, emprendedores… todo, pero si hay algo que me mola mucho es trabajar con la juventud, ya que es un proceso de la vida en el que las personas comienzan a tomar decisiones, entonces influir, inspirar y acompañar a esos jóvenes para mi es maravilloso, si puedo ayudarles e inspirarles.
ECN: ¿Qué les dirías a las personas que tienen sueños y a la vez miedos?
EM: Que sigan, que escuchen a su voz interior, que sientan el palpitar de su interior, lo que realmente les hace feliz y les apasiona. Los miedos los transformas en aprendizaje porque siempre te van a acompañar, pero lo que te ayuda e impulsa es la pasión, el corazón, el amor que le pones a lo que haces, además de la humildad de conocer tus errores y aprender.
ECN: ¿Qué es lo más duro que has vivido a lo largo de estos años?
EM: He vivido situaciones, a nivel personal y laboral, complicadas. Lo más duro fue cuando mi abuela sufrió un ictus, para mí fue un golpe muy duro, mi abuela era una mentora de vida, y eso que era “analfabeta”, pues no sabía leer ni escribir, pero siempre fue una persona llena de bondad, de buenos sentimientos y deseos, por ello siempre ha sido mi inspiración, además que me miraba con ojos de amor incondicional, me dio todo de ella desde que me conoció.
Cuando le paso eso para mí fue un duro golpe, a día de hoy me emociona, ya que sentí en ese momento que una parte de mi alegría había muerto. Entonces tuve que aceptar un proceso de duelo, pues a raíz de esta situación del ictus le detectan alzhéimer, y para mi es duro verla así y llevarlo. Lloraba porque no lo quería ver, por mucho que supiese sobre psicología o del ciclo de vida, mi abuela era un pilar que se desmoronaba y tenía que reconstruirlo de otra manera y esto conlleva a un periodo de transición.
Entonces notaba que me estaba muriendo, se lo decía a mi madre, porque realmente, ese día murió un parte de mí. Pero nació otra que me hizo madurar, valorar a las personas, el aquí y el ahora y que lo más preciado que tenemos es ese tiempo y eso me ayudó mucho para focalizarme en la atención plena, valorar lo que es realmente importante, y el aquí y ahora.
Después, es cierto que las diferentes crisis que a la gente de los 90 nos están tocando vivir, todo lo habido y por haber, y encontrar una estabilidad cuesta y llevarlo emocionalmente también. Entonces pues siempre ha tocado reinventarse y ponerse las pilas, han sido situaciones complicadas, pero con mucho aprendizaje.
Después respecto al tema Covid, a mí me ha hecho daño porque cuando mi negación estaba en pleno rendimiento y cogiendo camino se fue todo al traste, pero bueno toco reinventarme ver lo online y aprovechar los meses de confinamiento y he conseguido volver a coger el timón y el ritmo que quería en mi negocio y en mi vida. Todo son situaciones q la vida nos pone de aprendizaje, yo trato de verlo así porque creo q es importante poner este enfoque, y cuidar la energía.
ECN: ¿Si volvieras atrás volverías a hacer lo mismo?
EM: Si, volvería a hacer lo mismo. De hecho, en el año 2013 me llamaron de una entrevista de trabajo, un buen sueldo, buen horario, todo muy bien, era de comercial de teléfono… y aparentemente me servía para mantenerme y buscar mi camino, pero me propusieron otra alternativa que era estar como becaria en el centro juvenil de mi pueblo, La Palma del Condado, un proyecto muy bonito.
Ahí pides opinión y claro, las personas entran en el tema económico, “estamos en crisis, un sueldo…”, pero yo escuché a mi corazón y vi lo que realmente me hacía feliz en aquel momento. Acababa de terminar de estudiar una carrera, así que me permití estar de becaria y coger experiencia y no me arrepiento para nada porque me ha ayudado a conocer a muchos jóvenes, a saber, cómo se trabaja a nivel local, a conocer políticas sociales y la verdad es que no me arrepiento porque cogí mucha experiencia.
También he estado trabajando como trabajadora social en una asociación en Huelva, Agua Viva, en un proyecto muy bonito para emprender con jóvenes se llamaba “Empréndete” y para mí fue una oportunidad fantástica, conocí a un equipo humano maravilloso y encima estábamos atendiendo a jóvenes con exclusión social, para mí fue todo un aprendizaje y conocí una realidad que me ayudo a encaminarme en mi proyecto.
Después estuve como trabajadora social en el servicio de ayuda a domicilio en el Ayto. de la Palma, como monitora de talleres escolares, he tocado muchísimos colectivos (mujer, niños, personas mayores… ) me di cuenta que me encantaba trabajar con las personas independientemente de la edad. A día de hoy estoy enfocada al tema del emprendimiento, al tema de la autoestima y a desarrollar con los jóvenes prevención de situaciones de riesgo, como violencia de género, adiciones, bullying, ciberbullying. Por lo que les ayudo a que desarrollen esa autoestima y esos conocimientos, como prevención.
Estoy muy contenta con este camino, las personas que encuentro son fantásticas, muchas personas me muestran enseñanzas, recursos, pues yo no lo sé todo, simplemente pongo el corazón y con lo que hago trato de ayudar a la persona desde la humildad, autenticidad y la verdad de cada uno. No quiero trabajar desde la exigencia o el perfeccionismo que hacen que me sienta muy cansada, algo que se enseña en lo laboral y educativo. Yo pretendo que las personas salgan de ahí, que conecten con su verdad interior, su pasión porque al final es lo que te llevas.
Desde El Condado Noticias le deseamos toda la suerte a Esther, hacen falta más mujeres valientes que pongan el corazón en lo que hacen, al igual que tú. Para poder contactar o saber más de ella: socialcoach.es en los buscadores y hola@socialcoah.es vía Gmail.