La lluvia provocó que el Cautivo de Almonte regresase anticipadamente a su Capilla. El Miércoles Santo arrancó con la salida de la Hermandad del Cautivo en Almonte, pero la presencia de un imprevisto chaparrón trajo como consecuencia que Ntro. Padre Jesús Cautivo y su Madre, María Santísima del Rosario tuviesen que regresar antes de lo previsto a su casa.
A las 19.00 horas de ayer, Miércoles Santo, se abrían las puertas de la Capilla de Ntro. Padre Jesús Cautivo en el municipio de Almonte. Tras una reunión extraordinaria entre los miembros de la junta de gobierno tomaron la determinación de echarse a las calles a realizar su estación de penitencia.
Ntro. Padre Jesús Cautivo se perdía por las calles de su Barrio Obrero a los sones de la Agrupación Musical Santísimo Cristo del Amor «La Cena» de Huelva y bajo las ordenes del capaz José Morales Fernández.
Justo detrás de él y tras una cofradía de nazarenos vestidos con túnica azul, capa y antifaces blancos se encontraba su Madre, la Virgen del Rosario que se echaba a las calles almonteñas al ritmo de la Banda Municipal de Música Ntra. Sra. del Valle de La Palma del Condado y sus costaleros a las ordenes de Francisco Javier Delgado la mecían por su barrio.
En este año, la Hermandad del Cautivo de Almonte ha presentado como estrenos el tallado completo de la canastilla del paso del misterio del Cristo y también el dorado de la cartelera delantera del paso del misterio.
Sin embargo, debido a las previsiones meteorológicas desfavorables y la presencia de lluvia, junto con fuertes rachas de viento, esta Hermandad almonteña tuvo que regresar a su capilla antes de lo previsto. Según afirmaban a través de sus redes sociales, es una decisión que les ha supuesto mucha «tristeza y pena», pero que era necesaria y ya han comenzado la cuenta atrás para el próximo año poder vivir y disfrutar como se merece el Miércoles Santo en Almonte.