Hace unas semanas la Redacción del Condado Noticias se reunió con la almonteña y creadora del grupo “Almonte en tiempos de Pandemia” Rocío Trigueros, la cual ha comprobado a lo largo de estos meses que la solidaridad, el amor al prójimo y la humanidad siempre están ahí, pero afloran con más fuerza en los momentos duros.
Rocío crea este grupo con el objetivo de ayudar a su pueblo en la catastrófica situación, tanto económica como sanitaria, que llevamos viviendo ya hace prácticamente un año, y ha visto un lado de humanidad y de la vida duro, pero a la vez cargado de enseñanzas y de corazones nobles.
ECN: ¿Cómo nace esta iniciativa? ¿Y las ganas de emprender un proyecto como es “Almonte en tiempos de pandemia”?
RT: Yo siempre he participado en actos benéficos, temas solidarios de Almonte, y también me hubiese gustado mucho montar un comedor social, pero claro era difícil de gestionar y de llevar, se quedó en el tintero entre vida familiar y laboral. Así que esta idea surge una noche que estaba en casa dándole vueltas a la cabeza y acostando a Cayetana, que de vez en cuando se me ocurren algunas veces unas ideas, pero bueno esta la vi factible y acorde a mi situación familiar y laboral me tire a la piscina.
La verdad que lo primero que pensé fue, ¿cómo puedo hacer algo bueno por el pueblo sin que implique mucho tiempo de mi trabajo y vida familiar? Pues cree un grupo que se llama “Almonte en tiempos de pandemia”, en este grupo de lo que trataba y la idea inicial era que cosas que ya teníamos en desuso y que no nos hacían falta y ya no nos son necesarias fuesen a parar a manos que realmente lo necesitasen, en vez de estar guardado en el trastero.
ECN: ¿Cómo vives los primeros momentos cuando en cuestión de días consigues que más de 1700 personas se impliquen a través de Facebook?
RT: Al principio pensé en salir hacia delante, y también pensaba, bueno si no tiene aceptación con borrarlo tengo bastante, no pasa nada. Pero luego la gente lo acogió con mucha ilusión, comprobé que la gente sentía la necesidad de ayudar y no sabía cómo canalizar esa ilusión. También es verdad que la ilusión era tan grande, que llegó un punto en el que teníamos más donaciones que gente necesitada.
Al principio a la gente le daba un poco de pudor mostrar sus necesidades de manera pública, entonces bueno la gente donaba pero había reticencia a la hora de pedirnos y solicitar ayuda. Aun así cada día nos llegaban iniciativas, además de donaciones, preciosas, de personas que se ofrecían para ayudar con papeleo a la gente mayor, solicitar citas médicas, hacer la compra, o lo que les hiciese falta mientras le invitaban a un café a la plaza. Eran cosas q te conmovían. Al igual que una familia que no tenía muchos recursos, hizo una cadena solidaria para ayudar a otra en el sentido de intercambio de cosas, era la solidaridad representada en una cadena humana.
Además, también surgieron ayudas a residencias y que eran bastante grandes, como la solicitada por el Madre Dios, solicitaban material sanitario y nosotros lo pusimos en el grupo, junto al número de cuenta, y el material necesario. Llegaron de todo tipo de donaciones, incluso desde Sevilla, no paraba de sonar el teléfono.
Me sentí agradecida, abrumada, por la aceptación y el nivel al que llegó. A su vez se ponen en contacto conmigo desde Bollullos y La Palma, me dice que si me parecía que crearán un grupo en cada pueblo, y como les dije ojalá que hubiese uno de estos en todos los pueblos.
Las primeras semanas, eran todo el día con el móvil liada, agotadoras, tras un mes todo fue a un ritmo más moderado y pausado. De hecho, es que una de las mayores campañas fue la de Navidad de alimentación para gente que no iba a poder pasar la Navidad y no tenía recursos. La gente comenzó a donar, se pusieron carritos en las puertas de los supermercados, se llegaron a conciertos para que también los supermercados salieran beneficiados, comenzaron a llegar donaciones como la de “Quesos el Sequillo” con diez lotes… por lo que no os imagináis lo que conseguimos.
Yo inicie esto sola, pero aquello cogió un volumen que yo no era capaz de gestionar sola. Entonces contacté con algunas amigas y cada una nos encargamos de una cosa, Ahinoa de los juguetes, Isa de la ropa e Irene, Pepa y yo de la comida, que era lo que más demanda tenía y bueno.. ese tema se nos fue totalmente de las manos ya que teníamos una cantidad de familias necesitadas y de donaciones que acabe pidiendo ayuda al Ayuntamiento y nos dejaron el Ciecema, para entregar cosas y recibir donaciones.
ECN: A quién le expresaste esta inquietud y lo que era una idea al principio ¿quién te ayudó a ponerla en marcha?
RT: En un momento inicial empiezo yo sola, y a las dos semanas se ponen en contacto conmigo Irene y me dice que bueno que si necesitaba ayuda, que ella era moderadora en varios grupos que si necesitaba ayuda que se la pidiera para lo que fuese. Luego Pepa Medina igual, me llamó diciéndome que a ella le encantaría formar parte de este proyecto y claro eran varios tipos de donaciones y claro eran muchas cosas, estaban las puertas abiertas. Entran Irene y Pepa y después pido ayuda a Ahinoa Jacinto e Isa Contreras, para que ellas se encargaran del tema de ropa y los juguetes y cosas de bebe.
ECN: ¿Qué valores has visto en las personas que han intentado ayudar? ¿Qué has visto que es lo que realmente necesita la gente que venía a pedirte ayuda y los valores que han transmitido los que han aportado esa ayuda?
RT: Me he dado cuenta de muchisimas cosas, yo he estado en contacto con la Hermandad Matriz y Asuntos Sociales del Ayuntamiento, porque claro nosotros hemos pagado facturas de la luz, comprado cosas, y gastado dinero en diferentes cosas, entonces claro, esto tiene que estar en conocimientos de las instituciones públicas para tener un control, porque igual que esta la gente por necesidad, está la gente que buscan la mínima para aprovechar, esto es como la vida misma, la gente no tiene conocimientos.
Si que es verdad que lo que yo me llevo de esto es como la gente en un momento de dificultad a nivel sanitaria pero también económica, se ponen las pilas, porque hay gente pasándolo fatal. Y es impresionante como cuando vemos peligrar a nuestros vecinos hemos estado todos a una, y bueno estamos en esta situación, pero vamos a intentar salir de esta por lo menos de rodillas. Yo me llevo esa satisfacción de corroborar que esos sentimientos y solidaridad, y lado solidario oculto están ahí y florecen cuando más se necesitan.
ECN: A nivel personal ¿qué balance y conclusiones sacas de estos meses?
RT: A mi, ha habido situaciones que me han llegado al alma, tener tus reyes preparados y que lleguen familias que no tienen para sus hijos y llorando te den las gracias porque van a tener algo, fue una de las situaciones que más me tocó la fibra.
Después a nivel personal me llevo el haber puesto mi granito de arena, que no se si es grande, mucho o poco, no lo se, pero si hemos sido capaces de ayudar aunque sea a una familia en estos meses me ha valido. Es verdad que ahora comienza la campaña agrícola y hay muchas personas que viven de esto, y también hay mucha gente que te agradece la ayuda de estos meses, pero es honrada y te cuenta que ya empiezan a trabajar y van a tener ese sustento, entonces ellos mismos honradamente te dicen “ya no lo necesito mira a ver si otra persona lo aprovecha más”.
ECN: Algunas veces tenemos un concepto de la humanidad, en el cual cada uno vivimos como nos interesa, sin mirar al de al lado, ¿te ha dejado esto algún aprendizaje a nivel social y humanitario?
RT: Totalmente, nadie se imaginaba pasar por esta situación y que un comercio o bar que funcionase bien se tuviese que cerrar porque viniese una pandemia mundial, entonces yo en cuanto al lado humano de las personas tenía serias dudas, incluso como decía antes, yo cuando cree la pagina tenia planteada la opción de que no tuviese aceptación y dar el cerrojazo, pero bueno… yo he descubierto un lado solidario en las personas, en el pueblo, Almonte es un pueblo muy parecido a la Palma en la condición de las personas, en la forma de ser… entonces a mi me ha sorprendido para bien y muchísimo, y he descubierto ese lado solidario que yo en cierto modo sabía que teníamos ahí guardado en un rinconcito y ha aflorado.
Me decía un señor, “Rocío nos has tocado la fibra” y sinceramente yo me quedo con eso. El que crear el grupo haya servido para tocar la fibra y despertar ese lado humano y solidario que todos llevamos dentro, yo ya me quedo satisfecha y me siento orgullosa del trabajo que hemos hecho las cinco en todo este tiempo, porque esto no lo he hecho yo sola, ha sido algo conjunto, ya que yo sola no hubiese podido.
Rocío se despedía, “me quedo con el agradecimiento a ese montón de personas que han colaborado, esto era un grupo simple y llanamente y tengo que agradecer de corazón al pueblo de Almonte, al igual que a La Palma y a Bollullos, porque esto no hubiese sido posible. Han salido muchas cosas bonitas, aun sin recursos y gente que no tenía a dado y ahí se ha mostrado todo”.
Desde El Condado Noticias agradecemos a Rocío y le damos la más sincera enhorabuena por esta labor que están llevando a cabo y por expandirla en estos tiempos tan duros para algunas personas.