Broche de oro a la quincena piompera, La Palma volvió a brillar al paso de la Santa Cruz de la Calle Sevilla. 

Si algo identifica mayo en La Palma es la tradición y sentimiento crucero que se desborda cada primavera. Tradiciones de padres a hijos, de abuelos a nietos, de amigos que se encuentran año tras año bajo una misma devoción o del simple sentimiento de amor. La calle Manuel Siurot se volvía a inundar este fin de semana de reboso y alegría con las fiestas en honor de la Santa Cruz de la Calle Sevilla.

La Hermandad de la Santa Cruz de la Calle Sevilla ha vivido una primavera llena de recuerdos, fiestas y exaltación a la Cruz, que ha culminado con el fin de semana. El calendario de fiestas quedaba inaugurado con el Programa Especial de las Fiestas 2024 de la Hermandad de la Santa Cruz de la Calle Sevilla. Los festejos continúban el viernes con la entrada y desfile de la Banda de Cornetas, Tambores y Escuadra de Gastadores de la Brigada Paracaidista de Paracuellos del Jarama. Antes, a las 19:00 horas, se realizaba la inauguración de la plaza Brigada Paracaidista y monumento alusivo. Tras este acto comenzaba el desfile por  toda la Avenida de Sevilla con parada especial en la capilla de la Santa Cruz.

A las 22:00 hacía su tradicional entrada desde El Punto, la otra banda que cada madrugá acompaña a la hermandad trianera, la Banda de Cornetas y Tambores “Tres Caídas de Triana”. Ambas bandas participaron en la Ofrenda de Flores a la Virgen del Valle, que dio comienzo a las 23:00 horas del viernes. Un cortejo compuesto por más de un centenar de piomperas ataviadas con sus trajes y que portaban en la mano un ramo de flores para la Patrona. Además, resaltaban de manera importante las reinas de las fiestas, damas, Junta de Gobierno y los hermanos y hermanas de la Santa Cruz.

El sábado, daba comienzo con la Diana Floreada, a las ocho de la mañana, a cargo de Banda de Cornetas, Tambores y Escuadra de Gastadores de la Brigada Paracaidista de Paracuellos del Jarama. Por la tarde, a las seis y media, comenzará el Romerito compuesto por caballistas, charrets, carros, manolas y las artísticas carrozas confeccionadas por Manuel Martínez Ligero. Carmelo el Tamborilero, la Banda Municipal de Música Ntra. Sra. del Valle de La Palma, y la Banda  de Música Ntra. Sra. de Albricias de El Cerro del Andévalo pondrán las notas musicales durante el recorrido.

El domingo, día marcado en rojo en el calendario piompero, la Santa Cruz comenzaba su traslado a la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista a eso de la diez de la mañana al son de la Banda Municipal Ntra. Sra. del Valle de La Palma y la Sociedad Filarmónica Ntra. Sra. del Carmen de Salteras y rodeada del amor y el cariño de todos sus fieles y devotos.

Tras la Función Principal de Instituto, la Santa Cruz de la Calle Sevilla procesionó por las calles de La Palma en una mañana de mayo llena de gozo y fervor para el pueblo piompero. Una procesión que finalizaba a eso de las cuatro de la tarde con el canto del himno en la puerta de la capilla. Esta procesión estuvo acompañada musicalmente por Carmelo el tamborilero, Banda de Cornetas y Tambores Ntra. Sra. del Sol de Sevilla y la Sociedad Filarmónica Ntra. Sra. del Carmen de Salteras.

Tras una mañana de sentimiento y devoción la tarde dio lugar a la convivencia de cruceros y cruceras en la calle Manuel Siurot, y que tuvo como culmen final el tradicional baile por sevillanas a las puertas de la capilla de la Santa Cruz y la quema de un toro de fuego infantil, y  un toro de fuego para los adultos. A la espera del fin de semana del Corpus la quincena piompera se cierra con el júbilo y la alegría de haber vivido las Fiestas en honor a la Santa Cruz un año más.

Todos estos actos y cultos estarán presididos por la reina de las fiestas, Alba Cebrero Tejada y por la reina infantil, Berta Carrascosa Báñez y sus damas de honor.

Fotos: David Limón Suárez, Ayuntamiento de La Palma del Condado y Pedro García Lagares

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