La Santa Cruz de la Calle Cabo ha vuelto a ser protagonista en las calles de La Palma, portada con devoción por sus hermanas.
La venerada Santa Cruz de la Calle Cabo ha vuelto a ser protagonista en las calles de La Palma, portada con orgullo y devoción por sus hermanas, en una de las celebraciones más entrañables y cargadas de fe de la localidad. Bajo el manto de las estrellas que iluminan el cielo palmerino, el tradicional recorrido de la Cruz ha despertado la emoción y el fervor de todo el pueblo.
El triduo en honor a la Exaltación de la Santa Cruz dio comienzo con tres días de oraciones y reflexiones, un preludio espiritual que culminó en la Fiesta Principal, donde la Cruz fue llevada a hombros en un acto que simboliza el profundo compromiso de los fieles con su fe y sus tradiciones. Este evento no es solo una demostración de devoción a la Santa Cruz, sino también una manifestación de amor a Dios, al pueblo de La Palma y a la familia.
La Exaltación de la Santa Cruz de la Calle Cabo es mucho más que una tradición. Para los devotos, es un acto de fe y de entrega total a Dios. Durante la celebración, se resaltó que exaltar esta Cruz es comprometerse a ser testigos de la alegría y la misericordia divina, siendo «pregoneros» de una fe que transforma el sufrimiento en un grito de amor y esperanza.
Cada año, este acto moviliza a las hermanas y fieles de la Hermandad, quienes asumen el rol de «arcilla dispuesta a ser moldeada por Dios», abiertas a ser llenadas de su voluntad. El espíritu de la celebración es un testimonio de fe, esperanza y caridad que fortalece la identidad religiosa de La Palma, recordando a todos los presentes que la fe es un compromiso vivo que se manifiesta en actos de amor y misericordia hacia el prójimo.
La Santa Cruz de la Calle Cabo ha vuelto a unir a su comunidad en un emotivo recorrido, reafirmando el profundo sentido de devoción y fraternidad que caracteriza a este pueblo, donde la fe se vive y se exalta con gran fervor año tras año.