España se prepara para enfrentar la primera ola de calor del verano superando los 40º

Las temperaturas podrían superar los 40 grados en varias regiones este fin de semana, entre ellas Andalucía.

España se prepara para enfrentar la primera ola de calor del verano, prevista para este fin de semana. Según las previsiones meteorológicas, las temperaturas podrían superar los 40 grados Celsius en varias regiones del país, mientras que las noches tropicales, con mínimas que no bajarán de los 20 grados, dificultarán el descanso nocturno.

Durante la semana, un anticiclón provocará un ascenso progresivo de las temperaturas. A partir del viernes, las altas presiones dominarán, llevando las temperaturas a niveles muy altos, tal y como señalan los meteorólogos. Se espera que las máximas alcancen los 35 grados en gran parte del país, entre 34 y 36 grados en la zona centro, y hasta 38-40 grados en el valle del Guadalquivir.

La situación climática se ha vuelto más inestable desde mediados de junio, con un descenso de temperaturas a principios de semana seguido de lluvias en el norte y oeste peninsular. Sin embargo, estas condiciones cambiarán drásticamente hacia el fin de semana debido a la influencia del anticiclón.

A medida que avance el fin de semana, se espera que las temperaturas aumenten significativamente, con máximas que podrían superar los 40 grados, generando un ambiente de calor intenso, especialmente en regiones como Andalucía y Extremadura.

Las noches tropicales serán otro desafío, ya que las temperaturas nocturnas se mantendrán por encima de los 20 grados. Esto significa que muchos españoles podrían experimentar dificultades para dormir debido al calor persistente durante la noche.

Recomendaciones para enfrentar el calor extremo

Las autoridades recomiendan tomar precauciones durante estos días de calor extremo, tales como mantenerse hidratado, evitar la exposición prolongada al sol, buscar refugio en lugares frescos. Con esta primera ola de calor del verano, España entra en una etapa de temperaturas extremas que podrían durar varios días, poniendo a prueba la capacidad de adaptación y resistencia de la población frente a las altas temperaturas.