La marisma se llena de vida con la explosión primaveral de flora y fauna, el espacio natural de Doñana destaca el renacimiento tras el temporal.

Tras el paso de las recientes tormentas, el Espacio Natural de Doñana vuelve a cobrar vida con la llegada de la primavera. La marisma, vital para la biodiversidad de la zona, está recuperando su mejor versión, convirtiéndose en un escenario único donde la naturaleza muestra toda su riqueza y esplendor.

Las aves que habitan el parque han intensificado su actividad, aprovechando este periodo para organizar sus puestas y garantizar la continuidad de sus especies. Al mismo tiempo, en las pequeñas lagunas del humedal, la microfauna acuática experimenta un auténtico auge, consolidándose como un pilar esencial en el equilibrio del ecosistema.

Desde el Espacio Natural de Doñana destacan este momento como una oportunidad excepcional para visitar el parque y disfrutar de su belleza en plena ebullición. Con la vegetación en su máximo esplendor y la fauna más activa que nunca, Doñana ofrece un espectáculo natural único que cautiva a visitantes y amantes de la naturaleza.

Un paseo por sus senderos o la observación de aves en la marisma se convierten en experiencias inolvidables en esta época del año, cuando Doñana muestra su cara más vibrante y llena de vida.

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