Suscrito esta semana dos convenios de colaboración que permitirán la reactivación del Programa Pigmalión en los institutos de la localidad.
El Ayuntamiento de Almonte ha suscrito esta semana dos convenios de colaboración que permitirán la reactivación del Programa Pigmalión en los institutos de la localidad, en coordinación con las asociaciones sociales del municipio. Se trata de una iniciativa de intervención socioeducativa orientada a jóvenes que han sido expulsados temporalmente de sus centros educativos, con el objetivo de garantizar su continuidad formativa y su reintegración en el entorno escolar.
En un mismo acto celebrado en el salón de plenos, el alcalde de Almonte, Francisco Bella, acompañado de la concejal Antonia Maraver, rubricó los acuerdos con los Institutos de enseñanza secundaria Doñana y La Ribera, así como con las AMPAS de ambos centros. Paralelamente, se formalizó también la colaboración con las asociaciones APRET, La Canariega y Alzheimer Doñana, que desempeñarán un papel clave en el desarrollo de los talleres comunitarios.
La recuperación de este programa ha sido especialmente valorada por la comunidad educativa, que ve en él una herramienta eficaz para abordar situaciones de conflicto, prevenir el abandono escolar y ofrecer a los alumnos nuevas oportunidades desde una perspectiva educativa, social y emocional. Así lo han manifestado los equipos directivos de los centros y las asociaciones de madres y padres, quienes han agradecido el impulso institucional a una medida que refuerza el acompañamiento a los menores en situaciones de vulnerabilidad.
El Programa Pigmalión contempla una atención personalizada para cada menor derivado por los centros, el diseño de talleres de desarrollo personal, la implicación de las familias y un seguimiento coordinado entre todos los agentes implicados. Según el convenio, el Ayuntamiento se compromete a proporcionar recursos humanos, materiales y espacios, así como a coordinar la intervención con los profesionales de las entidades colaboradoras.
Durante su participación en el programa, el alumnado llevará a cabo actividades prácticas en asociaciones del entorno local, con el objetivo de fomentar la adquisición de valores, el desarrollo de capacidades y la mejora de la autoestima. Una acción que supone un paso firme del consistorio con la educación inclusiva, el acompañamiento social y la construcción de una convivencia escolar más justa y solidaria.