Joven palmerino que siente pasión por el fútbol, «nunca me ha llamado la atención meter goles, pero sí pararlos», así define David sus inicios. Como todo niño sus primeros partidos los jugaba en la plaza del pueblo, al fútbol sin ley, donde todos eran amigos y la rivalidad jamás existía.
David comienza en el Club Deportivo Siempre Alegres de La Palma del Condado, club que lo ha visto crecer desde benjamín hasta cadete de segundo año. En sus primeros años en el mundo de portero, son muchos equipos de la provincia los que se empiezan a fijar en él y llega a jugar en la Selección de Huelva tanto en la categoría de benjamín como en la de infantil, a su vez, también contaron con él como cadete, pero debido a una fractura de un dedo de la mano, no pudo jugar.
Una vez finalizada la temporada de primera andaluza como cadete de segundo año, vuelve a recibir la llamada del Recreativo de Huelva, a pesar de no calificar esta temporada como una de las mejores, siente que este es su momento, el momento de empezar el cambio. En el Decano, se sintió bien desde el primer momento y una vez asentado sintió que había acertado, el Recreativo le ha ayudado a sacar lo mejor de él mismo.
«Agradezco mucho al Recre porque es un club que me ha hecho crecer muchísimo, sin olvidar que el Siempre Alegres es mi base y sin ellos no hubiese sido nada».
Son muchos momentos los que el fútbol le ha dado la oportunidad de vivir y sabe que aún le quedan muchos más por disfrutar. Se queda con tantos que no podría decirnos un momento clave porque para él cada momento tiene su valor, también insiste de que, a pesar de tantos momentos, se queda con las compañías: entrenadores, compañeros, familiares… cuenta que para él han tenido mucho significado las personas que estaban en esos momentos, no ha querido olvidarse de su entrenador de sus inicios en el Siempre Alegres «Fonfi»: «me ha aportado muchísimo tanto a nivel deportivo, como a nivel personal, le agradezco mucho su trabajo».
Los buenos momentos hay que disfrutarlos porque los malos, como bien sabemos, llegan solos, y como no todo es un camino de rosas, David, también ha vivido momentos agridulces de la mano del fútbol. Recuerda que uno de los peores momentos fue en un torneo como infantil en la selección de Huelva, donde considera que no tuvo una buena actuación y eso marcó para él un antes y un después en su vida profesional, ya que le hizo cambiar la manera de ver las cosas. Un momento duro para él pero a largo plazo considera que le ha traído resultados positivos.
A mitad del mes de mayo, la vida de David cambia por completo. Una vez finaliza sus estudios de bachillerato, es su familia quien le da la noticia de que el Deportivo Alavés se ha interesado por él para las próximas tres temporadas. Y así fue, desde el 1 de julio, David Gil, es el nuevo portero de este equipo vitoriano.
«La verdad que afronto esta nueva oportunidad y etapa con muchas ganas tanto a nivel deportivo como a nivel personal porque voy a crecer como deportista y como persona»
El nuevo portero del Deportivo Alavés es consciente de la nueva etapa de cambios a la que se enfrenta lejos de su familia, amigos y pareja, a los que insististe que va a echar mucho de menos, pero que sabe que ellos van a estar en todo momento acompañándole a cumplir su sueño como hasta ahora. Un sueño que le acompaña desde que era ese niño que jugaba en la plaza.
Además de esta nueva etapa en el mundo del fútbol , para él empieza una nueva etapa académica estudiando el grado de Administración y Dirección de Empresas en la Universidad de Vitoria.
Seguirá luchando por llegar a lo más alto, siempre con la cabeza bien alta y sin olvidar de donde viene y de quien le vio crecer. Desde El Condado Noticias le mandamos la mayor de las suertes en este nuevo camino que comienza.