Condenan a ocho meses de cárcel a la mujer que agredió a una médico en Isla Cristina el pasado 22 de junio.

El juzgado de lo Penal Nº1 de Huelva ha condenado a una mujer a ocho meses de prisión por «atentado a personal sanitario» sobre una médico durante una atención domiciliaria en Isla Cristina el pasado 22 de junio, al agredirla verbalmente e intentarlo físicamente. La facultativa recibió además un puñetazo en la cara cuyo autor ha sido condenado a internamiento médico.

Según han indicado en una nota de prensa, el Colegio de Médicos ha ejercido a través de sus servicios jurídicos la acusación particular en nombre de la facultativa y colegiada.
De este modo, a la condenada se le considera «autora penalmente responsable de un delito de atentado a personal sanitario, sin la concurrencia de circunstancias modificativas de la responsabilidad criminal», además, a la pena de ocho meses de prisión se le suma la inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena. No obstante, el juez ha acordado la suspensión de la pena, condicionada a que durante dos años no vuelva a delinquir.
Por otro lado, el hombre que golpeó a la médica, acusado de sendos delitos de atentado a la autoridad y lesiones, se le ha impuesto su internamiento para tratamiento médico durante seis meses, tras haberse constatado su deterioro cognitivo. Se da la circunstancia de que la condenada es cuidadora de esta persona y del enfermo al que se acudió a atender.
Los hechos ocurrieron sobre las 11,15 horas del 22 de junio cuando la facultativa acudió a una atención domiciliaria de urgencia solicitada al haberse caído de la cama el paciente. Según el relato de los hechos probados, se inició una discusión entre la condenada, familiar del enfermo, y la facultativa, por «las discrepancias que albergaba sobre la intervención médica llevada a cabo».
Esta mujer, según la sentencia, insultó a la médica y se abalanzó sobre ella, «con ánimo de menoscabar la integridad física» cuando esta salía por el portal de la vivienda, siendo interceptada por un técnico de ambulancia. En ese momento una segunda persona del entorno familiar «propinó un fuerte puñetazo en la mejilla derecha a la médica, causándole un traumatismo contuso en la cara».
Se ha determinado que el agresor padecía un deterioro cognitivo que afectaba, de manera «muy importante, a sus capacidades intelectuales y a su voluntad», por lo que se ha determinado su ingreso médico.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *