Los corazones de los habitantes de Villarrasa se han llenado de fervor y devoción durante la celebración de la festividad de San Isidro Labrador. La Hermandad de San Isidro ha protagonizado una emotiva procesión por las calles del pueblo, acompañando a su Titular en una muestra pública de fe que ha conmovido a todos los presentes.
El evento, que comenzó el pasado jueves con el traslado de la imagen de San Isidro a la Parroquia, culminaba con la Función Principal en el templo, seguida de una solemne procesión por las calles del pueblo y la entrega de la vara al nuevo Hermano Mayor, D. Francisco Ramos Lepe, ha sido uno de los momentos más destacados de la jornada, marcado por la continuidad de una tradición centenaria.
La romería, que ha tenido lugar el sábado y domingo, ha sido otro punto álgido de las festividades. Los hermanos y visitantes han compartido momentos de convivencia y alegría, disfrutando del ambiente festivo y de los obsequios de la Hermandad, que ha ofrecido mosto joven y altramuces de la tierra a todos los presentes.
El punto culminante de la celebración ha sido la procesión por las calles de Villarrasa, donde San Isidro Labrador ha sido venerado por los fieles, en un gesto de profunda devoción y gratitud. La jornada ha estado marcada por la unidad y la armonía entre los hermanos, que han demostrado una vez más el arraigo de esta tradición en la vida de la comunidad.
Con el regreso al pueblo al atardecer del domingo, los romeros han puesto fin a un fin de semana lleno de emoción y espiritualidad, renovando su compromiso con la fe y la tradición que caracterizan a la Hermandad de San Isidro de Villarrasa.
